Otra vez, Brasil se metió en el horizonte de la política para la resurrección de Vaca Muerta. “Los estados del sur de Brasil necesitan una energía que nosotros estamos en condiciones de ofrecerles en forma competitiva”, dijo el secretario de Energía, Sergio Lanziani, después de informar al embajador Daniel Scioli sobre el plan en ese sentido.
La salida a Brasil del gas nacional es una alternativas que el gobierno y las petroleras exploran. Vaca Muerta fue alcanzada con furia por la crisis terminal del macrismo, que se extendió por más de un año y medio.
La infraestructura no da para iniciar en lo inmediato un convenio gasífero para abastecer al sur de Brasil. Puede ser un gran mercado para la producción de gas que excede a la demanda nacional, aunque para eso se deben invertir unos dos mil millones de dólares en gasoductos.
La infraestructura de transporte está colapsada con la producción de Vaca Muerta, que con sus altas tasas de crecimiento sostiene en alza el volumen nacional de gas, a pesar de la tendencia en baja en los hidrocarburos convencionales. El gas nacional sobra en verano, pero falta en invierno. La demanda de la industria está golpeada por la retracción de la economía durante el macrismo.
Vaca Muerta crece, pero aún no llega al 20 por ciento de la producción nacional
El presidente de YPF, Guillermo Nielsen, promocionó desde Davos, adonde concurrió al Foro Económico Mundial, la construcción del gasoduto troncal previsto entre la zona de Vaca Muerta y San Nicolás, en cercanías del puerto de Rosario. Esa inversión abriría posibilidades más concretas para encarar la fase final de un plan para llegar con los recursos naturales arrancados de la roca bajo tierra en la Norpatagonia a Brasil.
"Vamos a intentar conectarnos con Vaca Muerta", replicó el ministro de Economía de Bolsonaro, Paulo Guedes, en el mismo evento.
Scioli informó que el encuentro con el secretario de Energía de este lunes se enfocó en el armado "de una agenda de trabajo común con el objetivo de cumplir los objetivos de integración con crecimiento interno, tal como nos indica el presidente (Alberto Fernández)”.
El ex gobernador bonaerense contó que Lanziani le transmitió "un panorama de las oportunidades y prioridades en la relación bilateral con Brasil en temas de energía”.
Fernández confirmó a Scioli como embajador de Brasil y a Felipe Solá como canciller
El titular de Energía insistió en que "el incremento de nuestras exportaciones tanto en hidrocarburos como en electricidad nos va a permitir sostener el crecimiento que demanda nuestra economía, tener más y más barata energía para ayudar a nuestro desarrollo industrial”.