“Con Portezuelo han difundido mentiras. Una es la potencial producción de energía, y otro que es una represa de regulación de caudal: son mentiras”. De esa manera sintetizó la Fundación Chadileuvú sus críticas a Mendoza por la obra Portezuelo del Viento, que planea el manejo de las obras del Río Grande.
Hector Gómez, presidente de esa entidad pampeana, señaló que la política de Mendoza en relación a los ríos está basada en “las mentiras”, con el objetivo de la explotación económica del recurso, según cita El Diario de La Pampa.
La Pampa es una de las provincias que se opone al manejo unilateral de la represa por parte de Mendoza, ya que supone el uso del agua de uno de los afluentes del Río Colorado. En su reclamo sumó e Neuquén, Río Negro y Buenos Aires.
Según la FuChad, la altura del dique de Portezuelo del Viento -sus 151 metros de altura lo convertirían en la represa más alta del país- encierra una ambición: el trasvase del río Grande al Atuel. Además apuntó al estudio de impacto ambiental que hizo Mendoza. “Tiene que ser integral. Lo hicieron en su territorio", agregó Gómez.
El apuro de Macri y Cornejo
Días atrás se conoció que Mauricio Macri ordenó a sus colaboradores directos presionar para que salga la aprobación ambiental para Portezuelo del Viento. Es una deuda que tiene que saldar el presidente con el gobernador Alfredo Cornejo.
El presidente asumió con Cornejo el compromiso de allanar el camino para la construcción de la represa. Se trata de uno de los caballitos de batalla del discurso del gobernador saliente.
Macri presiona para entregarle a Cornejo la aprobación ambiental de Portezuelo antes de tiempo