
Alfredo Cornejo y Rodolfo Suarez coordinaron un operativo conjunto con la Policía de Mendoza para sacar a un grupo de personas que viven en la calle sus pocas pertenencias y obligarlos a irse de la plazoleta Brown y de un pequeño espacio verde frente a la Terminal de Mendoza.
Fue este viernes por la tarde, cuando las fuerzas comandadas por ambos gobernantes aprovecharon que los excluidos hacían una asamblea para sacarles carones, cajas de madera y frazadas con las que se protegen de la intemperie y duermen en rincones.
Todo se enmarca en un operativo de vigilancia y despeje del espacio público encarado por el oficialismo, que anunció -además de que llevará al calabozo a las personas en situación de calle que se nieguen a ir a refugios- que habilitará a los Preventores a usar pistolas Taser, bastones y gas pimienta entre otras armas.
La inseguridad en las calles es un hecho en aumento que el Gobierno siente se descontrola en varios frentes. Y les atribuye a muchos de estas personas que viven en la calle parte de esa inseguridad en zonas como las inmediaciones de la Termina l y el Hospital Central.
El operativo contra los desposeídos fue registrado por periodistas que cubrían la asamblea de indigentes, organizada a pedido de la Municipalidad para "institucionalizarlos", aunque a la vista quedó que se trató de una treta para sacarlos de su lugar de descanso.

Desposeído = delincuente, según Suarez