El Sindicato Jerárquico y Profesional del Petróleo, y el Sindicato de Petroleros Privados de Cuyo junto las empresas mendocinas nucleadas en el “Bloque de Empresas” denunciaron en un comunicado una “conducta perversa y sistemática” del gobierno de Rodolfo Suarez y la Empresa Mendocina de Energia S.A (EMESA) en las concesiones de áreas petroleras.
En un comunicado firmado por Julián Matamala, secretario general del Sindicato Jerárquico y Profesional del Petróleo, Gas Privado y Químico de Cuyo y La Rioja, y Gabriel Barroso, titular del Sindicato de Petroleros Privados de Cuyo, advirtieron que “se han otorgado áreas petroleras por fuera de los procesos licitatorios a empresas que no reúnen las condiciones técnicas, operativas, logísticas y sin respaldo económico” con el único objetivo de “vaciar las reservas existentes en la Provincia sin realizar ninguna inversión”.
En ese sentido, sostienen que EMESA “se da el lujo de ignorar y no responder a las ofertas presentadas por empresas con marcada trayectoria en la industria y con respaldo económico” para llevar adelante inversiones.
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Los gremialistas pusieron como ejemplo de estas maniobras al área Calmuco, a 150 kilómetros al sur de Malargüe, “dónde se le otorga la operación y explotación a una sola compañía operadora, evitando de esta manera el registro de declaración de producción (Cap IV) y como consecuencia la pérdida de regalías”, se lee en el comunicado.
“Otro caso es Vega Grande, área que se intenta entregar a una empresa sin antecedentes ni estructura y sin patente de operador petrolero de SEN”, añadieron.
Y manifestaron: “Esos son los hechos que lleva a Mendoza a estar cada vez más relegada en materia petrolera. El sector vive una crisis grande pero la acrecientan estos directores que desconocen sobre la dinámica de la industria y no generan inversiones genuina”.
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El gremio y los empresarios aseguraron que el programa “Mendoza Activa” impulsado por Suarez sólo quiere beneficiar a EMESA y no genera planes de inversiones de nuevas perforaciones, “que es lo que hace mover el engranaje de la industria”.
Ante esta situación los gremios y las empresas mendocinas del Bloque de Empresas reclamaron una reunión urgente con el Gobierno provincial, EMESA y demás integrantes del bloque para tratar la futura política petrolera mendocina, "ya que corren riesgo de mantener sus puestos laborales más de 8000 trabajadores", advirtieron.