La estrategia para las paritarias del gobierno de Paco Pérez está amenazada por la política tributaria de Cristina Fernández

Share
Tiempo estimado de lectura: 3 minutos
El gobernador Francisco Pérez no tiene a su alcance resolver el aumento del mínimo no imponible de ganancias, como pretenden los gremios antes de cerrar las paritarias. Foto: Gobierno de Mendoza
El gobernador Francisco Pérez no tiene a su alcance resolver el aumento del mínimo no imponible de ganancias, como pretenden los gremios antes de cerrar las paritarias. Foto: Gobierno de Mendoza

En la primera cita paritaria concreta entre el Gobierno de Mendoza y los gremios estatales de la provincia quedó claro que la estrategia oficial está amenazada por la política tributaria nacional. Los docentes, citados en el primer turno de las negociaciones provinciales, condicionaron el porcentaje de incremento que están dispuestos a discutir a la suba del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias, una decisión que es exclusiva de la Casa Rosada, en la que Francisco Pérez puede influir poco y nada.

El gobernador Francisco Pérez no dio prenda sobre el porcentaje de máxima que está dispuesto el Estado a aumentarles a los estatales. Pero en distintas declaraciones propias y de sus funcionarios se deslizó entre el 20 y el 25% de incremento como propuesta posible a aceptar por la administración provincial.

Ese nivel de aumento fue bien recibido a través de los medios por Javier Guevara, titular del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación (SUTE), pero los paritarios del gremio lo primero que hicieron al abrirse la negociación oficialmente fue pedir la suba del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias antes de discutir los salarios de los docentes para 2013. El caso es testigo de lo que viene con el resto de los gremios del Estado porque el SUTE es el único de ese núcleo que está enrolado en una central sindical oficialista: la CTA que conduce a nivel nacional el kirchnerista Hugo Yasky.

Los otros tres gremios fuertes de los estatales menndocinos (ATE, AMPROS y Judiciales) están alineados  en la CTA opositora que encabeza a nivel nacional Pablo Micheli. La postura de estos será más dura y los métodos para conseguir lo que pretenden en la paritaria más combativos que los del SUTE, que ya amenazó con no empezar las clases si antes no se cierra el acurdo salarial.

Las CGT también condicionan las paritarias al impuesto a las ganancias

La CGT de Antonio Caló, alineada con el kirchnerismo, y la opositora, de Hugo Moyano, coincidieron en que las paritarias deberán estar sujetas a una previa mejora del impuesto a las ganancias, y a que el Estado y los empresarios reconozcan los índices reales de inflación, informó el diario La Nación.

“Nosotros queremos cambiar las escalas de Ganancias. Puede haber otras alternativas, pero el tema es ése: antes de discutir paritarias queremos terminar con el tema Ganancias”, afirmó el textil Jorge Lobais, del Consejo Directivo de la central cercana al Gobierno.

En la CGT opositora piensan lo mismo. “No tiene sentido discutir aumentos si todo lo que consigas se lo va a llevar el Gobierno”, fundamentó Hugo Moyano, citado por el diario Clarín. El camionero agregó que en caso de que no haya cambios en Ganancias es posible que los gremios empiecen a negociar aumentos salariales “en negro”, es decir sumas que no sufran descuentos del fisco.

El mismo medio, informó que el lucifuercista Oscar Lescano, de la mesa chica de la CGT que lidera Antonio Caló, sumó otro argumento: “La paritaria depende de cómo resuelvan lo de Ganancias. Lo que va a traer si no se resuelve este tema son pedidos desmedidos”, alertó, sobre la posibilidad de que muchos terminen pidiendo subas superiores al 25%.

Share