Mientras Netflix demora un documental sobre Panamá Papers en su plataforma, The Panama Papers, otro documental de idénticas características fue subido en YouTube en las últimas horas, producido por Epix, realizado por Bungalow Media, escrito y dirigido por Alex Winter.
En Argentina Netflix va a estrenar su producción a fines de febrero, y hay quienes interpretaron la demora como una medida en favor de Macri, quien apareció en esa pesquisa junto a su padre, Franco Macri, y su hermano, Mariano, como directivos de Fleg Trading, una sociedad de las islas Bahamas registrada en 1998 como “una derivación del holding que los Macri habían montado en Argentina y en Brasil”.
Netflix promociona en su plataforma el documental, sin embargo, cuando los usuarios intentan verlo aparece un cartel de "no disponible". El portal Perfil consultó a la compañía streaming sobre este faltante: “Va a estar disponible en todos los países de Latinoamérica en breve, pero está en proceso. Se presenta la carátula para que los clientes se sientan interesados en el contenido y luego de un cierto periodo de tiempo se incorpora a la plataforma”, fue la respuesta al diario.
Mientras tanto, la demora y la indignación de los usuarios le sirven a Netflix como una gran publicidad gratis en las redes.
The Panama Papers, el de YouTube, no es especialmete crítico con Macri, sólo muestra tangencialmente que estuvo involucrado en la filtración, y se dedica a ensalzar a los periodistas que recolectaron la información. Uno de ellos al ser entrevistados habla de documentación "de dictadores como Al Assad y Putin". A este último le dedican buenas partes, llamando a Rusia un "sistema neo feudal". Sobre el final, en los títulos, el documental indica que los Panamá Papers "contribuyeron al impeachment contra Dilma Rousseff en Brasil".
Panama Papers fue la filtración de 11,5 millones de documentos de la firma de abogados panameña Mossack Fonseca. Los registros fueron revisados por un equipo de más de 370 periodistas de casi 80 países, en 25 idiomas diferentes. Los mensajes de correo electrónico, hojas de cálculo financieras, pasaportes y registros corporativos obtenidos revelaron secretos de los propietarios de las cuentas bancarias y empresas en 21 jurisdicciones offshore.
