Más de 40 organizaciones sociales, civiles, antirrepresivas feministas, sindicales y políticas firmaron un documento conjunto a cinco meses de la muerte de Florencia Magali Morales, quien fue hallada muerta en el calabozo de la comisaría de Santa Rosa de Conlara, San Luis.
Florencia Magali Morales, una mendocina de 39 años, madre de tres hijos, salió de su casa en es pueblo puntano (vivía en San Luis hace tres años), a las 9 de la mañana del domingo 5 de abril. Pocas horas después estaba muerta en el calabozo de la comisaría del pueblo. Sobre su muerte, el juez Jorge Pinto investigó desde el principio un suicidio, pero ahora la causa lleva la carátula “averiguación muerte”. La insistencia de la familia y de sus abogados sobre las irregularidades en la investigación fueron clave en este cambio.
La perito de parte de la familia de Florencia informó que en la segunda autopsia realizada en el cuerpo se encontraron heridas y golpes en el cuerpo, en la zona genital en particular, y en las piernas, así como signos de omisiones del forense en la primera autopsia.
A cinco meses de su muerte, en un comunicado colectivo se plantearon las preguntas aún abiertas sobre su destino.
"Por qué la policía difundió desde un primer momento que Florencia Magali Morales había sido detenida por circular en bicicleta a contramano por la calle Rivadavia, si luego quedó evidenciado que ella ingresó espontáneamente a la comisaría?", es la pregunta que inicia el comunicado.
Se preguntan después por el juez que investiga la causa, por el rol del defensor, por la primera autopsia con omisiones, y sobre la información de prensa del Poder Judiail replicadas en los medios masivos.
"Qué pretende ocultar este entramado policial, judicial, mediático cuando la débil hipótesis del suicidio se derrumba?", cierran los interrogantes.
Este es el comunicado completo, y sus firmantes: