Con un video difundido en las últimas horas los enfermeros y trabajadores de la salud precarizados volvieron a pedirle a Rodolfo Suarez que los pase a planta permanente. Advierten allí los enfermeros sobre la realidad en los hospitales de Mendoza sobre la cual ya habían lanzado sus alertas los terapistas: ya no hay recurso humano para hacer frente al ritmo de la multiplicación de casos de COVID-19.
Los enfermeros y enfermeras que están en los servicios críticos de los hospitales vienen intentando visualizar esa situación a la par que reclaman que se los pase a planta para trabajar en condiciones de seguridad. Ante la nula escucha de Suarez y de la ministra, Ana María Nadal, votaron hacer un acampe el 4 de noviembre.
"Está todo colapsado, inauguran camas UTI sin personal y sin espacio, ya no saben a dónde meter a los pacientes. No damos abasto y muchos compañeros así como ingresan permanecen dos o tres semanas y renuncian -contó un trabajador del Hospital Central a EXPLÍCITO-. Hay compañeros que no cobran desde abril. Cuando terminan de formarse se los llevan al sector privado, donde un enfermero cobra 50 mil pesos. Muchos, después de cobrar lo que le debían renunciaron".
En el video difundido en la previa al acampe, advierten: "Nos han aumentado el trabajo, la cantidad de pacientes, el número de camas en terapia, pero de nada le sirve al señor gobernador habilitar respiradores y camas si no cuenta con el personal para atenderlos de forma adecuada".
Los Licenciados en Enfermería y Técnicos asistenciales en Salud resumieron las demandas del sector en un video. Algunos de los testimonios fueron:
"En Mendoza somos más de tres mil los trabajadores que estamos siendo precarizados, ejerciendo nuestras tareas sin reconocimiento profesional, en condiciones que nos exponen a la violencia y el desamparo laboral e institucional".
"Estamos en primera línea, enfrentando esta pandemia sin obra social, sin ART, sin licencias, sin aguinaldo. No contamos con licencia de cuidado familiar, y si nuestros hijos se enferman, no podemos cuidarlos".
"Cobramos sueldos miserables que van de 16 mil a 21 mil pesos realizando las mismas tareas y trabajando las mismas horas que un personal de planta permanente".
"Nos da vergüenza e impotencia como se maneja el gobierno provincial. recurrimos al gobernador Suarez y a la ministra, Ana Maria Nadal, para pedir que se nos valores y se nos pase a planta efectiva en forma inmediata".
"No podemos seguir en estas condiciones, somos quienes estamos dándolo todo para mantener de pie al sistema de salud".
"Nos han aumentado el trabajo, la cantidad de pacientes, el número de camas en terapia, pero de nada le sirve al señor gobernador habilitar respiradores y camas si no cuenta con el personal para atenderlos de forma adecuada".
"Queremos brindar una atención segura y de calidad a nuestros pacientes y que no sean un número más como el gobierno pretende. Ya no podemos seguir explotándonos en dos o tres trabajos para llegar a fin de mes, exponiendo nuestras vidas y la de nuestros familiares".
"Exigimos que el gobierno cumpla con la ley de carrera y el convenio colectivo de trabajo en el cual desde el 2015 somos considerados profesionales pertenecientes al régimen 27".