Explotación laboral. Pérdida salarial de más de 40%. Contratos precarios. Salarios por debajo de la línea de pobreza. Aumento por decreto de 9% después de un año sin recomposición. Cierre de paritarias. Todo forma parte del combustible que mantiene encendida la protesta de trabajadores y trabajadoras de la salud, que este jueves desde las 7.30 vuelven a movilizarse en el inicio de otras dos jornadas de paro.
A las 10, en tanto, los gremios se reunirán frente a la la Legislatura y desde allí marcharán a Casa de Gobierno.
Así lo resolvió en la explanada del Hospital Notti el miércoles la asamblea interhospitalaria, que los gremios de estales pretenden recuperar como máximo órgano de toma de decisiones de los trabajadores.
Esta será la quinta medida en poco más de un mes que llevan adelante los estatales del sector salud junto a gremios de la educación, judiciales, de organismos de control, autoconvocados y docentes universitarios.
"Lo único que entiende un gobernador que odia a los trabajadores y trabajadores, que ajusta a nuestras espaldas con la pauta publicitaria y las obras públicas, es la masividad y la continuidad de la protesta", postuló en la explanada de Casa de Gobierno Raquel Blas, de SITEA, uno de los sindicatos que convoca al paro.
En ese sentido, la referente gremial recordó lo ocurrido en las calles de Mendoza con la ley del cianuro en diciembre de 2019: "No es la primera vez que Suarez tiene que volver atrás. Tuvo que volver atrás con la 7722, un pueblo entero en las calles a la mañana, a la tarde, a la noche, hizo que este gobernador que había sancionado una ley tuviera que darla de baja. Qué nos importa que haya un decreto o acuerdo paritario en baja, si no le sirve a los trabajadores para dignificar su vida, lo tenemos que tirar", postuló.
También convoca AMPROS, el gremio de los profesionales médicos. Recalcó el sindicato que "la medida de fuerza abarca al personal de planta de hospitales y centros de salud de toda la provincia, además de contratados, prestadores, becarios, residentes y toda modalidad que reúna a trabajadores de la salud de la provincia en la totalidad de los departamentos".
En la calle desde diciembre de 2019
Los licenciados en enfermería y los prestadores de salud precarizados permanecen en las calles desde fines de 2019, antes que se declarara la pandemia, y durante todo el 2020 realizaron acciones en los hospitales e incluso un acampe frente a la Legislatura por sus salarios por debajo de la línea de pobreza.
A ellos se sumaron luego los profesionales médicos, nucleados en AMPROS, y en las últimas semanas los residentes hospitalarios -que cobran entre 150 y 180 pesos por hora- se organizaron en asamblea para reclamar también por su extrema situación.
Con un bono en negro de 7 mil pesos para los profesionales, Suarez buscó desactivar las medidas de fuerza, pero AMPROS lo rechazó. El gremio incluso advirtió que las sumas en negro -que el Gobierno ya impuso a principios de 2021- podrían volverse una constante en las paritarias, anulando así los aumentos acumulativos que permiten al menos empardar con la inflación.