Hebe de Bonafini estuvo dos horas reunida con el papa Francisco en la residencia de Santa Marta, en Roma. La presidente de Madres de Plaza de Mayo fue invitada a un encuentro catalogado como "privado" por El Vaticano.
En una entrevista por Radio del Plata, Hebe contó detalles del encuentro. Relató que el pontífice la recibión con mucho afecto y le dio espacio para que le contara su visión sobre el presente de Argentina bajo la Presidencia de Mauricio Macri, a quien se opone fervientemente la titular de Madres.
"El Papa me decía que está triste y que esto le hace acordar al 55", remarcó Bonafini en una de las escasas frases que puso en boca del jefe mundial de la Iglesia Católica Romana. "Lo vi muy preocupado se le notaba", describió.
La dirigente reveló que le pidió al pontífice que viaje a la Argentina este año, pero que Francisco se excusó por incompetencia de agenda. "Necesitamos de él", advirtió Hebe al tiempo que remarcó que su motivación para viajar a Roma fue poder llevarle su visión del país al Papa, contra las versiones que indicaban que la reunión transcurriría entre referencias a la causa fundacional de las Madres de Plaza de Mayo. "De Madres hablo siempre, en todos lados. Esta reunión era para otra cosa", puntualizó Bonafini entrevistada en el programa Secreto de Sumario, que conduce Darío Villaruel.
[iframe width="100%" height="65px" scrolling="no" frameborder="no" src="//radiocut.fm/audiocut/embed/mini/hebe-de-bonafini-despues-de-visitar-al-papa-en-santa-marta" ][/iframe] [iframe src="//storify.com/SinMaripositas/hebe-de-bonafini-tras-reunirse-con-el-papa/embed?header=false" frameborder="no" allowtransparency="true"][/iframe]Antes de la entrevista radial, Hebe ofreció una conferencia de prensa en Roma. Contó que se disculpó con Jorge Bergoglio por el trato dispensado cuando era jefe de la Iglesia porteña, antes de llegar al máximo cargo en El Vaticano. Admitió Hebe que con Francisco le pasó lo mismo que con Néstor Kirchner, a quien cuestionó mucho antes de conocerlo y sellar una relación de afecto hasta la muerte de ex presidente.
En términos de Hebe: "Bergoglio creció cuando se transformó en Francisco, le dije que me disculpaba porque me había equivocado con él, porque cuando uno se equivoca lo tiene que reconocer y las madres reconocemos cuando nos equivocamos".
"Estamos muy afligidos, quieren obligar al pueblo a lo que pasó en el 2001, a que salgamos a la calle a asaltar los supermercados. No le vine a contar fantasías al Papa, le vine a contar qué nos pasa. Fuimos un pueblo que fuimos felices durante 12 años y en cinco meses destruyeron todo", advirtió ante los periodistas reunidos para interrogarla en la capital italiana.
"Ninguno de los planes de Cristina sigue adelante, todos los cortaron, no hay más planes para ayudar a mujeres embarazadas y niños. Cerraron comedores para los pobres. No estamos dispuestos a quedarnos callados, no estamos dispuestos a quedarnos con los brazos bajos. De esto hablé con el Papa, le dije que lo necesitamos, que queríamos que venga, sus palabras pueden ser muy importantes. Santo Padre, usted impidió el bombardeo de la OTAN, lo que pasa en Argentina es más fácil, ojalá lo pueda parar", repitió Hebe ante la prensa lo que antes planteó ante el papa Francisco.
Elisabetta Piqué, corresponsal del diario La Nación, describió la entrada de la líder de las Madres a Santa Marta: Bonafini, de 87 años, se presentó en silla de ruedas en el Vaticano, donde llegó acompañada por Marta Cascales, la esposa del ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno, su médica, Silvina, su secretaria, Sofía, el compañero López y personas de la asociación italiana Kabawil. Según la presidenta de Madres de Plaza de Mayo, que fue la única vocera del encuentro -ya que desde el Vaticano no hubo comunicados de prensa-, éste duró dos horas. Bonafini estuvo entonces a solas con el Pontífice, que más tarde saludó a los demás componentes de la delegación.
Francisco antes del encuentro: "Veo el dolor de una madre"
El Vaticano no ofreció detalles del encuentro ni en forma directa ni por comunicado de prensa. El papa se expresó antes del encuentro y debido a que fue maltratado por sectores de la derecha argentina, con Elisa Carrió entre las más beligerantes, junto al asesor de Macri, Jaime Durán Barba, vocero del desprecio por el pontífice que se expresa entre quienes le pagan por dirigir la propaganda del Presidente.
En una carta enviada a un amigo a la que accedió la agencia Télam, Francisco escribió: "Parece que la piedra del escándalo es que yo reciba a la señora Bonafini. Sé bien quién es, pero mi obligación de pastor es la de comprender con mansedumbre. Esta señora, desde la plaza (de Mayo), me insultó varias veces con artillería pesada pero a una mujer a quien le secuestraron los hijos y no sabe cómo y cuánto tiempo los torturaron, cuándo los mataron y dónde los enterraron, no le cierro la puerta. Lo que veo allí es el dolor de una madre. Si me usa o no me usa no es mi problema. Mi problema sería no tratarla con la mansedumbre de pastor".
