El ex ministro de Relaciones Exteriores y columnista exclusivo de Mañana Sylvestre (radio Del Plata) reflexionó sobre la actualidad del reclamo argentino en el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas. Valoró como positivo el pedido de Cristina Fernández de Kirchner al papa Francisco, de que interceda para que Gran Bretaña dialogue por las Islas. Y destacó el vigor del apoyo de otras naciones latinoamericanas: “El cambio de época y la tendencia hacia la integración regional hace que nuestros vecinos compartan el problema de Malvinas como propio. Además el siglo XXI es el de las disputas por los recursos naturales, y casos como el de Malvinas generan antecedentes preocupantes que también incrementan la atención de los países de la región”.
“Hoy 2 de abril se conmemora a todos los caídos en Malvinas en el 82. Así que es un día importante no sólo hacia adentro, como país, sino en lo que refiere a mantener el reclamo y la reivindicación de Malvinas, algo que la semana pasada tuvo un buen punto cuando el Canciller argentino Héctor Timerman, junto con otros representantes de naciones del Mercosur, Unisur y Celac, fue a Naciones Unidas y pidió al Secretario General las gestiones de buenos oficios. Eso fue positivo”, destacó Taiana.
En su columna habitual en Mañana Sylvestre el ex canciller señaló que “en realidad si uno mira desde el referéndum que hicieron los británicos, creo que Argentina ha tenido una buena respuesta. Los británicos estuvieron pensando ese referéndum durante dos años: ´¿Qué hacemos frente al creciente reclamo argentino?; bueno, vamos a hacer un referéndum´. Ellos lo han pensado y van a tratar de explotarlo como un hecho de participación democrática, van a tratar de llevarlo a distintos países y foros, pero creo que quedó bastante desteñido por dos hechos: primero Cristina le pidió al Papa Francisco su intervención, lo cual lo que hace es demostrar que por primera vez hay un Sumo Pontífice que está a favor de la Argentina en el caso Malvinas, lo que no es poco, más allá de la viabilidad inmediata de la intermediación. Hay que recordar que la Iglesia Católica tiene alguna diferencia con los británicos desde los anglicanos…”.
“Por otro lado –continúo Taiiana- hay que valorar el apoyo de la región. Hoy en realidad hay más solidaridad que antes. En la época de la guerra, algunos no tenían casi nada de solidaridad, para decirlo de manera elegante… Pero el apoyo creció. Y creo que por dos razones: por un lado porque hay un cambio de época, que tiene que ver con dos cosas muy importantes: primero hay una perspectiva, un sentimiento, una actitud y una política favorable a la integración regional; y para usar una metáfora barrial, una cosa es que un vecino al que uno saluda respetuosamente tenga un problema y nada más; pero otra muy distinta es que un vecino del cual uno es socio tenga un inconveniente… La tendencia hacia la integración en América Latina y en particular en América del Sur hace que naturalmente un problema tan importante de integridad territorial, como es Malvinas, no sólo sea un tema argentino sino que pase a ser un problema que los otros comparten”.
Según Taiana hay otro punto muy importante “y es que el siglo XXI, además de ser el de la tecnología, es claramente el siglo de las disputas por los recursos naturales. Entonces si uno está en la región y está preocupado por el futuro de sus recursos naturales y ve que en un país de la propia región hay una potencia extranjera que está ocupando militarmente un territorio que no le pertenece y se quiere llevarse recursos naturales renovables y no renovables, va a poner mayor atención y va a ver si esto no está generando un antecedente que pueda complicarlo en el futuro. Esas dos cosas hacen que el reclamo de Malvinas y el apoyo de la región sea más fuerte y vigente. Y en la medida en que la región crezca, el apoyo será más importante.
La estrategia inglesa
Consultado sobre la percepción del tema Malvinas puertas adentro de Inglaterra, Taiana señaló que los conservadores tienen un apoyo grande: “Lo cierto es que no les va bien y la situación económica no es buena, pero no les va tan mal como a otros países de Europa. Actualmente están con todo un debate sobre cuánta distancia quieren tomar, o no, de la Unión Europea; y tienen en el camino un plebiscito en Escocia, que en principio está fijado para el 14, sobre la posibilidad de independizarse del Reino Unido…”.
“Lo que pretenden es mostrar que ellos son firmes, duros, y que defienden lo suyo -concluyó Taiana- en una especie de intento tardío y desvaído de evocar la dureza de Margaret Thatcher. A los conservadores probablemente eso les rinda un poquito, porque Gran Bretaña sigue siendo un país muy importante, es la sexta economía del mundo, sigue integrando el Consejo de Seguridad, aunque evidentemente es un poder político, económico y militar en declinación… Entonces ellos creen que todavía les sirve dar muestras de fortaleza y firmeza”.
Fuente: GustavoSilvestre.com
