Familiares de Florencia Magali Morales participaron en la tarde de este lunes de la marcha de las piedras, como se llamó el homenaje que en todo el país se rindió a quienes murieron afectados por la COVID-19.
Sin embargo, junto a la piedra que colocaron en su nombre, fue la correspondiente aclaración: "Florencia Magali Morales no murió por Covid, la mató la Policía de San Luis".
Florencia era una mujer mendocina que vivía en Santa Rosa de Conlara con sus hijos. Se investiga su muerte ocurrida en el calabozo de la comisaría del pueblo el 5 de abril de 2020.
Sobre la detención de Florencia hay dos versiones dadas por la propia policía de ese destacamento: primero dijeron que había sido detenida porque circulaba a contramano en su bicicleta violando el artículo 205 sobre el aislamiento. Por su DNI no podía salir ese día de su casa según la reglamentación del gobierno de Alberto Rodríguez Saá. Después señalaron los uniformados que ella sola fue a la comisaría porque allí había un policía conocido, y que se presentó a pedirle una tarjeta de débito para que pudiera retirar dinero del banco.
Para la Nación, hubo violación de DD.HH.
En un escrito firmado por Horacio Pietragalla Corti, como particular damnificado por la Secretaría de DDHH, se enumeran las prueba que constan en el expediente y que hacen presumir que se está ante un caso de violación de los derechos humanos.
“Morales fue ilegalmente detenida, incomunicada, golpeada en sede policial (no presentaba golpes antes de su ingreso) y luego apareció muerta en un calabozo con un cordón que -según consta- no tenía en su poder. Estos hechos de inusitada gravedad no pueden ser livianamente subsumidos al art. 249 del Código Penal, porque eso sería obviar los graves delitos que hemos enunciado, propiciando directamente un escenario de impunidad”, expresa el escrito.
Por tal motivo, la Secretaría de DDHH solicitó que “se cite a indagatoria a los policías que estaban cumpliendo funciones en día 5 de abril de 2020” en esa comisaría “por haber sido responsables de la privación ilegítima de la libertad de Florencia Magali Morales mediando abuso de autoridad; y por haberle propinado apremios ilegales”.
“Ello, sin perjuicio de que se continúe investigando la causa de la muerte de Morales y la posible responsabilidad de los agentes policiales en dicho resultado, que hasta aquí no puede descartarse, sino todo lo contrario”, añade la presentación judicial.
Para esa parte, la privación ilegítima de la libertad de Morales quedó probada en base a testigos que indicaron que fue detenida y encerrada en un calabozo “por exclusiva decisión policial, sin orden judicial, por un supuesto delito que sólo requería la realización de un acta y su inmediata liberación”, ya que se trataba de la violación del ASPO.
En cuanto a los apremios ilegales, desde el organismo dejaron asentando que el informe médico realizado a Morales antes de ser alojada en la comisaría indica que se hallaba “sin lesiones corporales” y que “en el lapso de tiempo de las 9:45 horas, que salió del hospital, y alrededor de las 19 horas, cuando fue encontrada sin vida por efectivos policiales, recibió apremios ilegales” en la comisaria.
Al respecto, destaca que la mujer fue hallada ahorcada con un cordón negro a pesar de que le habían quitado el calzado y que no había ningún elemento de ese tipo en la celda antes de que fuera encerrada.
“Es inexplicable hasta aquí la presencia del cordón negro con el cual Morales se habría ‘suicidado'”, indica el escrito.
Otro punto abordado por la secretaría fue la inexistencia de un informe pericial en la causa que indique las circunstancias de la muerte de Morales, debido a que las muestras tomadas del cuerpo y de la escena del hecho no fueron debidamente conservadas.
“Para colmo, la búsqueda de verdad se vio seriamente amenazadacon la frustrada pericia, en donde se informó que no se puede determinar la causa de muerte por haberse conservado mal los elementos orgánicos, lo que constituye una acción de encubrimiento que debe ser investigada debidamente”, indicaron.
En ese sentido, y con el fin de continuar con la investigación de la causa de muerte, la secretaría solicitó la realización de una pericia criminalística para analizar las distintas hipótesis de la muerte.