Una galería de personajes que van de Gilda, a Perón y Evita, pasando por la Coca Sarli y Estela de Carlotto sorprenden al expectador en esta muestra realizada por alumnos y profesores de arte.
Por Viviana Ponieman
Para Télam
El lenguaje gráfico y la comunicación son portadores tanto de subjetividades como del inconsciente colectivo. De ese modo los realizadores expresan quieran o no, el bagaje cultural, el conocimiento, la relación afectiva, y las versiones o rumores acerca de los personajes abordados.
Esto se puede ver claramente en el proyecto 100 x 100 argentinos, que a través de una feliz propuesta de una la cátedra de diseño de la UBA, reunió a más de 400 alumnos exalumnos y docentes.
La exposición es el resultado de una actividad de taller propuesta por la catedra Salomone de la carrera de Diseño Gráfico de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU) de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Para este proyecto, toda la cátedra en su conjunto, más de 450 alumnos de los tres niveles, docentes, ex-alumnos e invitados, trabajó durante dos semanas con un mismo objetivo: retratar a un personaje desde una mirada positiva y celebratoria, evitando desarrollos panfletarios y simplistas. La técnica de representación fue libre.
“100X100 Argentinos” es una mirada colectiva a personalidades destacadas de los últimos cien años en diferentes soportes: un libro, una película de animación, un sitio web interactivo y una exposición.
En el Museo Evita se pueden ver los afiches resultado de esta experiencia que, enfrentó a los jóvenes a trabajar en grupo, compartiendo diferentes niveles de formación, para elaborar un retrato gráfico del personaje adjudicado, lo que implica una investigación y un debate acerca de las biografías y el contexto, cómo y qué se hace, y sobre todo cual es la mano que dibuja, o cómo se produce el retrato.
Como metodología de trabajo se conformaron equipos de cinco miembros de los tres niveles coordinados por un docente, que sin afán antropológico, sin deseo de construir “el argentino” y prescindiendo del concepto de próceres o héroes. Se abocaron a investigar y luego a traducir en imagen, a estos argentinos destacados, elegidos de manera ecléctica.
“Se intentó mostrarlos en toda su dimensión”-afirma el curador y director de la cátedra- “En aquello que fueron destacados y en lo que los convierte en uno de nosotros. Porque cada uno de ellos es, en parte, uno de nosotros. Porque entenderlos a ellos y su contexto es pensar una parte de nosotros”.
Y lo producido una colección de posters de carácter festivo, que invoca a personajes tan disimiles como la "Coca" Sarli, Gilda, Antonio Berni, Aníbal Troilo, Gasalla , Piazzolla, Atahualpa Yupanqui, Azucena Villaflor, Quinquela Martín, Bernardo Houssay, Cachafaz, Carlitos Balá, Carlos Gardel, Carlos Monzón, César Milstein, Charly García, Maradona o El Eternauta, entre muchos otros.
Representaciones que intentan dialogar con un público actual, nos interrogan e incluso dan cuenta del grado de conocimiento, de percepción y de hondura o de cuan empapados están los jóvenes acerca de estos hombres y mujeres relevantes que acompañan y hacen a la vida de los argentinos.
La colección es encantadora, algunos afiches denotan una mirada ingenua, otros se resuelven de una manera barroca, otros desdibujan o deconstruyen, algunos encuentran la síntesis de concepto e imagen, como las llamas encendidas de Estela de Carlotto - Abuela de Plaza de Mayo.
Otro estímulo que se ofreció a los participantes fue una serie de categorías conceptuales como “Magia y misterio - Correr contra el viento - Puro fuego - Atrevidos por naturaleza, o Los reyes del hogar”, que aglutinó a los personajes de la tele, como Pepe Biondi, Marcelo Tinelli, Pertona .C de Gandulfo o Niní Marshal.
El apartado "Pensar el mundo" lo comparten Leloir, con Alberto Ginastera, Arturo Jauretche, Mafalda y también Enrique Santos Discépolo que llevaba debajo de un diseño muy bien resuelto el epígrafe de “cantautor”.
Uno de los objetivos de este proyecto es el de inventar espacios y relaciones sociales, fuera del ámbito universitario y hacer realidad la premisa de que si bien el diseño es un trabajo individual alcanza su máxima expresión en la construcción colectiva.
Para esto se propone crear lazos con una comunidad que es la principal acreedora de la universidad pública. Y reconocer que el diseño es un gran constructor de sentido.
En relación con esto, hubo algunos epígrafes que sorprendieron a esta cronista, por un lado el de Perón donde decía militar y político, y no figuraba como presidente, aunque en la línea de tiempo se asientan sus tres gobiernos, sin embargo Raúl Alfonsín sí se registra como político y presidente.
Otro factor que se destaca en la línea de tiempo, como la biografía en 3 puntos relevantes, debajo del afiche de Eva, marcan con un circulo el año 1950 y escriben: “primera manifestación del cáncer”.
Confieso que aunque esto puede ser cierto, si tenemos que elegir 3 momentos trascendentes de la trayectoria de Evita, hacer foco en la enfermedad me produce cierto ruido, me remite a algo doloroso, sí, pero un poco morboso y flaco con respecto a toda vida. Tal vez la elección de ese dato en particular fue para reconocer la dimensión humana de Evita?
Ese recorte también se puede leer en muchas crónicas actuales, donde se alude a la enfermedad que se la llevó trágicamente, como en una nota del Telégrafo de Ecuador acerca de otra muestra de Evita donde publican también: “… En Brasil se rinde homenaje a la “ex presidenta argentina”. (sic)
Me pregunto si estas imprecisiones, errores u omisiones expresan sólo un cierto nivel de desconocimiento, una poca rigurosidad por el apuro o, son las trampas del lenguaje que expone un conjunto de ideas y de versiones de la historia, donde se destacan algunas cosas y se eluden o confunden otras, en definitiva distorsionan los hechos y construyen un cierto sentido común.
Estas imprecisiones muchas veces involuntarias, reflejan lo que subyace en la comunicación y que muchas veces trasciende las intenciones. Elecciones que se cuelan en el lenguaje, y se revelan en la obra que porta la capacidad dialéctica entre las subjetividades del autor y el espectador, signadas por el magma de un inconsciente colectivo, de un relato.
De cualquier manera o justamente por todo esto enfrentar a los jóvenes de una carrera como diseño con personalidades y personajes relevantes de nuestra historia es auspicioso.
Así como reconocer el contexto y como parte del aprendizaje la semántica de imagen signos y símbolos en el concepto de que todo lenguaje lleva múltiples capas y dispara interpretaciones.
Es interesante ver la galería de personajes que como en un espejo nos saludan desde estas piezas gráficas, que con imaginería diversa empiezan a construir para sí y para los otros un lenguaje gráfico, que resulta como un termómetro del encuentro del diseño con la historia.
Y también ayuda a descubrir cómo los discursos impregnan las imágenes, y de ese modo reconocer que el diseño es un gran constructor de sentido en la sociedad.
Para los que puedan viajar a Buenos Aires, o estén allí, la muestra se puede ver en el Museo Evita de Lafinur 2988, de martes a domingos de 11 a 19 hasta el 21 de Julio.
