El secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, fue muy claro sobre la situación del jefe del Ejército, César Milani, en la causa donde se lo investiga por la desaparición del conscripto riojano Alberto Agapito Ledo durante la última dictadura. "Si el día de mañana existiera algún elemento que le diera razón a un juez para para dictar el auto de procesamiento, la Presidenta lo pasará a retiro", dijo.
En declaraciones a la radio Nacional Rock, Fernández aseguró haber analizado el caso de Milani cuando era senador y que el cuerpo legislativo le otorgó el ascenso al militar porque no había "absolutamente nada" en sus antecedentes que lo impidiera.
Sin embargo, reconoció que "si el día de mañana existiera algún elemento que le diera razón a un juez para dictar el auto de procesamiento, seguramente pasará a retiro como la Presidenta lo hizo oportunamente con el almirante (Jorge) Godoy o con el general (Roberto) Bendini".
Estela de Carlotto avaló la investigación
"Este hombre está denunciado y hay que probar si es cierto, mientras tanto rige una consigna que no es mía: 'Todo ciudadano es inocente hasta que se demuestre lo contrario'", sostuvo la dirigente humanitaria, en diálogo con radio La Red.
"La Justicia está actuando y tiene que actuar porque donde hay denuncias hay que investigar y saber qué grado de responsabilidad tiene cada quién", dijo.
Respecto del nombramiento de Milani como comandante del Ejército, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo señaló: "Lo acepté porque son designaciones que ejerce la Presidenta y como confío en ella confío en sus decisiones. Lo cual no quiere decir que a veces cualquiera de nosotros, nadie es Dios, como para tener algún error, equivocarse, pero soy respetuosa de las decisiones de quien dirige los destinos de nuestro país".
El martes, el fiscal federal Carlos Brito pidió al juez federal Daniel Bejas que cite a Milani como imputado de la desaparición del conscripto riojano Alberto Agapito Ledo. El soldado riojano, de 20 años, desapareció el 17 de junio de 1976 cuando se encontraba en Tucumán, con una compañía del Batallón de Ingenieros en Construcciones 141 de La Rioja, donde cumplía el servicio militar obligatorio. El encargado de instruir el sumario por la supuesta deserción de Ledo fue el entonces subteniente Milani. En el expediente judicial se menciona que el conscripto era "el asistente" del hoy jefe del Ejército.
Fuente: La Nación