Por Gerardo Aranguren
Para Tiempo Argentino
Los ex jueces federales Rolando Carrizo Elst, Luis Miret y Guillermo Petra Recabarren continuarán en libertad por el resto del juicio oral que se desarrolla en Mendoza en su contra por delitos de lesa humanidad. Así lo decidió la Cámara de Casación Penal en los últimos días, al considerar que no existe riesgo de fuga de los ex magistrados, acusados como partícipes de secuestros y torturas en la última dictadura. El ex camarista Otilio Romano es el único de los ex magistrados que permanece detenido, consignó Tiempo Argentino.
El pedido de detención de Carrizo Elst, Miret y Petra Recabarren fue solicitado por las querellas y la fiscalía apenas comenzó el juicio oral, en febrero del año pasado, pero el Tribunal Oral Federal de Mendoza lo rechazó. Ahora fue Casación la que confirmó la decisión del TOF, por lo que los ex jueces continuarán en la misma situación hasta que finalice el juicio oral. La mayoría de los otros 30 acusados permanecen detenidos.
Miret y Petra, al igual que Romano, llegaron a ser jueces en la Cámara Federal de Mendoza, máxima autoridad judicial de la provincia. Carrizo Elst, por su parte, fue juez federal en la provincia.
Los cuatro ex magistrados están acusados por su rol de partícipes de delitos de lesa humanidad pero sólo Romano sigue detenido ya que, justo antes de ser destituido por esta causa, se escapó a Chile y recién logró ser extraditado dos años después.
“Pedimos la detención cuando inició el juicio oral porque junto al fiscal ajustamos la calificación legal a participación primaria, un delito cuya pena podía ser prisión perpetua o penas elevadas, y eso motivaba que pudiera existir peligro de fuga o entorpecimiento”, explicó a Tiempo Pablo Salinas, abogado querellante por el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos de Mendoza.
El fallo de Casación llegó en la etapa final del juicio oral, que en poco más de dos meses tendrá una sentencia. Además de los cuatro ex jueces, hay otra treintena de imputados, entre policías mendocinos, miembros de la Policía Federal, Ejército, Fuerza Aérea y Servicio Penitenciario.
"No nos pareció un revés judicial porque sabemos que Casación está dejando libre a los represores mientras no esté la condena firme. No nos conforma, pero la esperábamos. Entendemos que la situación se va a definir ahora con la sentencia", dijo Salinas sobre los antecedentes de Casación: una treintena de represores condenados en Tucumán fueron liberados por el máximo tribunal Penal y lo mismo sucedió en Salta, donde 15 condenados fueron liberados.
El mismo día que se conoció la decisión de Casación, en la audiencia de ayer del juicio oral declaró Walter Hoffman, quien contó que fue visitado por el ex juez Miret en uno de sus lugares de detención.
"No tenía idea por qué me pasaba eso, tenía 23 años y lo único que había hecho era estudiar", contó el sobreviviente ante el Tribunal Oral. Tras varios días de tortura, fue llevado a la Brigada de Comunicaciones del Ejército y allí recibió la visita de una persona que luego pudo reconocer como el ex magistrado y que le dijo: "Quedate tranquilo que vas iba a salir de acá." El mismo Miret le reconoció años después que había sido él quien lo había visitado en el centro clandestino de detención. Además, su firma estaba en el expediente judicial en el que lo habían sobreseído. En el mismo lugar de detención estaba también Luis Moriña, quien días después sería desaparecido.