“La provincia tiene indicadores sociales que no son buenos, como en el resto del país, tiene mucha pobreza, mucha indigencia. Pero no es lo mismo ser pobre en Mendoza que en otras provincias". Con esa definición sobre el final de su Gobierno Alfredo Corneo admitió los índices en negro que deja a su sucesor, Rodolfo Suárez.
Fue en un seminario organizado por la Unión Comercial e Industrial de Mendoza en el Hyatt, donde Cornejo asumió una parte de lo que el INDEC informó sobre los índices de su gestión.
En tres años, bajo el gobierno de Cornejo el índice de pobreza aumentó 12,4% y la indigencia aumentó 78,4% en Mendoza. El dato surge de la comparativa de los números oficiales del INDEC tomados desde la primera medición -realizada en el último semestre de 2016- hasta la última, que midió los datos del primer semestre de 2019.
Sólo en el último año en Mendoza se registraron 117.917 nuevos pobres y 66.561 indigentes, el doble de los que había en el primer semestre de 2018 según la pobreza medida en ingresos.
No obstante, para Cornejo "no es lo mismo ser pobre en Mendoza". En sus palabras: "El hospital público funciona en casi el 100%. Se tienen 180 días de clases. Hoy en Mendoza está funcionando el Estado. Pero no me conformo con eso. Creo que Mendoza puede más y que tiene su sector privado vigoroso y el poder político debe seguir creando las condiciones para que el sector privado genere riquezas”. Sus declaraciones fueron difundidas por la UCIM y por el propio servicio de prensa del Gobierno.
Más desempleo que en 2015
Otro de los indicadores que ilustran un panorama negro para los años que se vienen es el desempleo: el gobernador saliente se va con el doble de desempleo y menos trabajo privado en blanco que su antecesor, Francisco Pérez, siempre según datos oficiales.
En Mendoza en los últimos tres años la tasa se duplicó. Pasó de 4,4% a 8,8%. En cantidad de personas sin trabajo es más que el doble: de 18.000 personas sin trabajo se pasó a 42.000 sólo en Gran Mendoza.
Además, triplicó la cantidad de personas que tienen trabajo y buscan otro para poder llegar a fin de mes.
La cantidad de población ocupada buscando otro trabajo era en el segundo trimestre de 2016 de 33.000 personas. En 2017 subió a 43.000 personas, en 2018 pasó a 94.000 personas y este año fueron 103.000 personas en ese período.
Cornejo se va con el doble de desempleo y menos trabajo privado en blanco que cuando asumió