El cornejismo recicló a Roberto Munives -quien fuera jefe de policía durante el primer mandato de Alfredo Cornejo y también en el de Rodolfo Suarez- y le dio un cargo en la Municipalidad de Godoy Cruz.

Munives se vio forzado a renunciar en 2022 tras varios escándalos que lo tuvieron como protagonista. El excomisario tuvo violentos comportamientos en oportunidades reiteradas siendo jefe la fuerza armada provincial, además de protagonizar escándalos por usar para su familia los bienes de Estado.

Definió su caída definitiva el tráfico de influencias para hacer ingresar a su pareja al Parque Aconcagua sin tener permiso para hacerlo. 

Ahora el intendente de Godoy Cruz, Diego Costarelli, del círculo íntimo cornejista, lo nombró como director de Tránsito y Convivencia Ciudadana, según le confirmó el intendente a diario Uno.

Antecedentes violentos

Munives causó varios escándalos desde que Cornejo lo puso al frente de la Policía, al asumir la Provincia, en diciembre de 2015.

En octubre de 2019, cuando culminaba una protesta por la represión en Chile en la plaza homónima de la capital mendocina, la Policía desplegó una fortísima represión sobre los manifestantes con gases y balas de goma.

El jefe Roberto Munives fue filmado pegándole patadas y manotazos a una manifestante. Hubo detenidos.

También fue cuestionado por sus declaraciones tras el femicidio de Florencia Romano: el jefe de la Policía responsabilizó a la familia de la chica en prime time de la TV, sin que por ello hubiera consecuencias. Tampoco dio explicaciones Munives sobre el fallido funcionamiento del 911 en ese caso cuando u vecino intentó alertar sobre gritos de auxilio de Florencia.

El propio Suarez lo protegió durante meses, evitando que éste fuera a la Legislatura, lo propio con el ministro del área, Raúl Levrino.