Con la aprobación de la DIA de Cerro Amarillo y el avance de Hierro Indio como propaganda, más el potencial de sacar Potasio en Malargüe, representantes del Gobierno de Mendoza viajarán esta semana a la feria megaminera Prospectors & Developers Association of Canada, en Toronto, en busca de inversores para avanzar con los proyectos extractivos.
"Mendoza comienza a mirar la minería con otros ojos y tiene oportunidades muy interesantes”, se ilusiona al respecto Emilio Guiñazú, exsubsecretario de Minería y Energía, hoy al frente de Potasio Río Colorado. El funcionario encabezará la comitiva mendocina en la feria, que se hace desde el 5 al 8 de marzo.
La aprobación de la declaración de impacto del proyecto de extracción de cobre en Malargüe le dio al Gobierno -mediante un proyecto flojo de papeles y sin garantía sobre la no afectación de glaciares- lo que no pudo lograr por la fuerza con el derribo de la Ley 7722: avanzar con la minería pese a la resistencia social al uso de tóxicos.
Tras la aprobación de la DIA de Cerro Amarillo, Rodolfo Suarez anunció la creación de una empresa estatal con la intención de multiplicar el modelo de poner plata del Estado en proyectos mineros para tentar a los privados. Ya lo hizo con Hierro Indio, pagando con fondos públicos la perforación de pozos, caminos y la instalación de campamentos, además de insumos.
El plan para acelerar el perfil minero de Mendoza incluyó el anuncio del relajamiento de las exigencias en las licitaciones para entregar áreas de fracking y petróleo convencional, como la eliminación de regalías y la inversión mínima que se pide a los empresarios.
Guiñazú lleva entre los objetivos promocionar el avance de la megaminería en Mendoza pese a las restricciones de la 7722: “El objetivo es seguir mostrando la potencialidad que tiene la minería en Mendoza, que aun con un marco legal bastante restrictivo y una historia reciente poco amigable con la industria, presenta un altísimo potencial, sobre todo en regiones donde la actividad no solo está aceptada sino que es requerida, como en el caso de Malargüe”, blanqueó.
“La idea no solo es mostrar todos esos proyectos sino seguir manteniendo en movimiento la rueda del sector minero”, completó el funcionario.
Para Guiñazú, uno de los más férreos detractores de la 7722 y militante del uso de cianuro, el avance de Hierro Indio -un proyecto en el cual la Provincia tuvo que pagar 1 millón de dólares para iniciar la exploración ya que no lo quisieron hacer los empresarios- y de Cerro Indio “son una muestra cabal de que Mendoza comienza a mirar la minería con otros ojos y tiene oportunidades muy interesantes”.
El eterno retorno a la feria canadiense
En 2005, Cobos mandó a su ministra de Economía, Laura Montero, al encuentro de minería mundial que se realizó en Toronto. La entonces ministra de economía fue a promocionar el potencial de negocios que tenía la cordillera mendocina para las trasnacionales mineras. En el interior de la provincia ya se gestaba una revolución popular en contra de la mega-minería, y en junio de 2007 fue sancionada la Ley 7722,
En marzo de 2016, más de 10 años después, el gobierno de Cornejo desembarcó en la feria mundial de minería en Canadá para promover "la búsqueda de potenciales inversores para el desarrollo malargüino".
"Con el objetivo de renovar el interés por el desarrollo de la mina Potasio Río Colorado en Malargüe, una delegación mendocina participará de la misión institucional al Congreso Mundial de Minería PDAC, que se desarrolla anualmente en la ciudad de Toronto, Canadá", publicitó el Ejecutivo, quien para tal misión envió al entonces subsecretario de Energía y Minería, Emilio Guiñazú.
En 2022, el propio Rodolfo Suarez encabezó la comitiva, y esta vez vuelve Guiñazú a intentar vender Mendoza como provincia donde la megaminería puede desarrollarse.