Ángel Fozzatti, jefe de la Policía de Mendoza, deslizó la posibilidad de jugar sin público los partidos de fútbol en la provincia para evitar la actuación de grupos violentos mientras se desarrollan los juegos. Lo hizo después del escandaloso desarrollo de la celebración de los 100 años de vida del club Independiente Rivadavia y en la previa del River-Boca previsto para el 29 de enero en el estadio Malvinas Argentinas de esta provincia.
"Creo que todos debemos hacer una autocrítica. Si esto no tiene solución se tendrá que jugar sin público; nosotros vamos a tener que ponernos más exigentes. No es normal que tengamos que afectar a un ejército de policías", le dijo el jefe de la Policía de Mendoza al canal Todo Noticias este miércoles en la mañana.
Sobre el fallido operativo desplegado para custodiar la seguridad del clásico mendocino en la cancha de Independiente, Fozzatti aseguró que "la cantidad de personal dispuesto fue el que se utiliza habitualmente. Evidentemente hubo una horda de delincuentes que buscaron suspender el evento y desbordaron en número a la cantidad del personal".
La Policía de Mendoza llegó al partido del martes en la noche con el antecedente de los incidentes ocurridos en el estadio Malvinas mientras se disputó el partido de Argentina con Chile por la primera ronda del Sudamericano Sub 20, organizado por la Confederación Sudamericana de Fútbol. En ese encuentro, un minúsculo grupo de hinchas trasandino fue agredido en la tribuna popular y otro grupo padeció lo mismo en la platea del estadio, ante la pasividad de los efectivos policiales que reaccionaron tarde.
