El SUTE advirtió que iniciará acciones legales contra el funcionario de la DGE de Junín que determinó la remoción de Carolina Gutiérrez, quien fue penalizada por utilizar lenguaje inclusivo al saludar a los alumnos.
El traslado de la docente es uno de los seis casos recientes de punitivismo del gobierno de Cornejo contra los maestros: se suma a los protagonizados por Paola Vignoni, docente dada de baja e inhabilitada por criticar el Operativo Aprender, Ricardo Ermili, supervisor cesanteado por criticar al gobernador en redes sociales, los tres docentes del IES Tomás Godoy Cruz imputados por participar de una asamblea.
El titular del gremio de maestros, Sebastián Henriquez, señaló que "Carolina, como todos los maestros, tiene derecho a usar el lenguaje inclusivo, que está contemplado en la Ley de Educación Integral. No daña a nadie, no ofende moralmente, no genera daños a terceros y no está prohibido por la ley"
Enmarcó la avanzada contra la maestra como "un clásico mecanismo de persecución política. Después del linchamiento van a aparecer otras denuncias contra Carolina, van a exagerar situaciones de conflicto. Esto pasa constantemente en las escuelas. Es un clásico de acoso laboral".
"Por eso hacemos responsables al intendente y a los funcionarios de la DGE por la integridad física de Carolina. Queremos que la compañera vuelva a la escuela y que ese sector de su comunidad se siente a dialogar. Y más teniendo en cuenta que Carolina ya había planteado dejar de utilizar el lenguaje inclusivo, -aunque no tiene por qué hacerlo- para descomprimir la situación. Así todo, fueron a hostigarla, como pasó con nosotros/as el lunes pasado", agregó Henriquez.
Luego postuló soluciones intermedias a la rigidez con la que un grupo de padres se opone al lenguaje inclusivo: "Queremos que Carolina vuelva a la escuela y que se descomprima la situación con la comunidad, que se sienten todos a dialogar".
Pedido por escrito a Correas
Tras el castigo a la docente de Junín, el SUTE envió un escrito a Jaime Correas, titular de la DGE, en el cual detallan que Hugo Martín, delegado de esa repartición en el Este, obligó a la docente y a miembros del gremio a retirarse de la escuela de manera violenta y en edio de insultos sin poder participar en el manejo del conflicto con el grupo de padres disconformes.
Esta es la carta enviada: