El ingeniero Sebastián Uchitel consideró "temerario" el proceso que desembocará en la transmisión de datos del escrutinio de las PASO, el domingo. Advirtió que con recursos se puede torcer el resultado de las elecciones. La transmisión de datos del escrutinio fue contratada Smartmatic, nacida en Venezuela y luego radicada en Londres.
Uchtiel fue galardonado en 2007 entre los mejores ocho informáticos del mundo.
"Hay cambios muy simples que se pueden hacer: se puede borronear para que llegado el momento de la carga, un acta sea ilegible. Entonces si se seleccionan los telegramas a borronear, se puede elegir cuál es el conjunto de telegramas que queda en ese cinco por ciento que nunca se termina de cargar. En una elección muy ajustada con eso se puede cambiar el resultado", explicó.
El ingeniero del Conicet consideró que para instaurar un sistema de estas características se debieron hacer ensayos pilotos antes de ir a todo el escrutinio. Puso como ejemplo lo actuado por el gobierno de Santa Fe, que tiene experiencia en este tema, habiendo comenzado con una pocas mesas para terminar en una aplicación integral con el correr de las elecciones.
El gobierno contrató a la empresa Smartmatic para prestar el servicio informático de las elecciones nacionales de este año. La Justicia había establecido que la compañía tenía que entregar los códigos del programa que usaría un mes antes de las PASO a los partidos políticos participantes.
A menos de una semana de las PASO, la empresa aún no entregó los códigos, ni pudo demostrar que su prestación no está viciada.
Sobre el sistema que se usará para el escrutinio el domingo que viene dijo que es falible. Argumentó que se puede modificar el resultado de los comicios.
