Con el golpe de estado en Bolivia quedó trunco un proyecto común entre ese país y Alemania para explotar el enorme reservorio de litio en el Salar de Uyuni, que esconde 5 mil millones de toneladas del que es considerado "el oro del futuro".
Junto con el mineral disponible en Argentina y Chile, Bolivia forma el "Triángulo del Cono Sur del litio". La tonelada de litio, que hace tres años costaba 3 mil dólares, hoy cuesta 7 mil.
Estados Unidos también ambiciona hacer negocios con el litio de esta región, d gran potencial por la importancia que tiene en las baterías de celulares, computadoras portátiles, autos eléctricos y otras maquinarias de la industria.
En septiembre de este año, visitó Jujuy Ivanka Trump, la hija del presidente, y anunció, durante un almuerzo en Purmamarca, una inversión de 400 millones de dólares destinada a obras viales cuya traza, explicaron empresarios ligados al gobernador Gerardo Morales, deberá incluir itinerarios desde y hacia los reservorios de litio.
Poco después se celebraron los comicios en Bolivia, con el consabido resultado de protestas que se multiplicaron en todo el país, una de las cuales exigía que Morales pusiera el fin al acuerdo con Alemania por el litio.
Cómo era el tratado con Alemania
"El lunes, a las seis y media de la mañana, escuché por la radio que el proyecto había sido cancelado. No lo pude creer", dijo Wolfgang Schmutz al semanario alemán Spiegel, citado por la agencia DW, en un reportaje hace dos días. Schmutz es el director general de ACISA, una empresa alemana con sede en el estado federado de Baden-Wurtemberg.
Junto con la empresa estatal boliviana Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB), Wolfgang Schmutz había firmado un contrato para el establecimiento de una empresa conjunta, en diciembre de 2018, en presencia del Ministro de Economía alemán, Peter Altmaier, con el fin de asegurar a Alemania un acceso directo a las mayores reservas de litio del mundo en el Potosí boliviano.
Sin embargo, presionado por las protestas sociales, Evo Morales dio marcha atrás con el decreto en el que había acordado con los alemanes, en términos muy beneficiosos para Bolivia.
Heiner Marx, director general de la empresa alemana K-UTEC, a la que ACISA encargó la planificación y construcción de la planta en Bolivia, comentó al respecto: "Nosotros facilitamos una transferencia de tecnología y creamos cientos de empleos primarios y miles de empleos secundarios. ACISA está respaldada por la industria automotriz alemana y el Gobierno alemán. Una mejor ayuda al desarrollo casi no es posible. No me parece una buena decisión rechazar esta oportunidad".
Litio, el "oro del futuro"
Impulsadas por la transformación de la industria automotriz, se estima que las ventas de litio en el mundo van a llegar a 7700 millones de dólares en 2022.
En Argentina, el litio hallado es de alta concentración y con pocas impurezas. Eso es provocado por el ingreso de manantiales hidrotermales que agregan litio al salar y al reservorio de salmuera. Así, los salares argentinos donde se extrae este material están distribuidos en Salta (41%), Jujuy (37%) y Catamarca (22%).
El creciente interés de varios países como Japón, Corea del Sur, China, Australia, Estados Unidos, Canadá y Francia en la extracción y comercialización en el norte argentino es cada vez más intenso.
Ong's, siempre presentes
En el viaje de la hija de Trump a Jujuy para financiar la ruta del litio se detalló que la plata llegará a través de una triangulación con la Compañía de Inversiones Privadas en el Extranjero (OPIC, por su sigla en inglés), agencia gubernamental autárquica con sede en Washington, que gestiona inversiones privadas en mercados emergentes.
Según el informe de Global Public Affairs, el proyecto de la OPIC optimizará la trazabilidad del denominado corredor C, que conecta con los puertos del Pacífico, a través del paso fronterizo de Los Libertadores. En el territorio donde la OPIC ha decidido invertir, se encuentra el denominado Triángulo del Litio, la zona donde se encuentra el 75 por ciento de las reservas mundiales de ese mineral.