Las petroleras, los sindicatos y el gobierno de Neuquén no se pusieron de acuerdo en qué hacer para frenar las muertes en los yacimientos. Con ocho trabajadores muertos en 15 meses, las partes discuten condicionadas por los intereses particulares.
Las petroleras consideran que los muertos son consecuencia de la falta de capacitación de los trabajadores. Los sindicatos culpan a la avaricia empresarial. Y el gobierno provincial sólo muestra que hace inspecciones regulares en los yacimientos. Cada parte defiende su juego.
Ocho petroleros murieron en la cuenca neuquina desde la flexibilización laboral para Vaca Muerta
El lunes se reunieron representantes de todos los sectores en la Casa de Gobierno de Neuquén. Antes, los petroleros habían anunciado un plan de lucha, que comenzó sin afectar la producción de los yacimientos.
El Sindicato Petrolero anunció un plan de acción por la muerte de dos trabajadores
La convocatoria la hizo el gobierno de Omar Gutiérrez en el marco de la Mesa de Vaca Muerta, que nació con el aura de un espacio de planeamiento para el futuro de la producción no convencional, pero se convirtió en la esfera para licuar crisis sectoriales.
Para adelante
Las compañías petroleras más importantes propusieron contratar a una consultora externa para que dictamine qué hacer. Los sindicatos quieren capacitar a sus delegados en cada empresa para que sean los garantes del cumplimiento de las normas de seguridad laboral. El gobierno neuquino admitió que hay defectos en el régimen laboral de los petroleros.
La seguidilla de accidentes con muertos en la cuenca neuquina se dio a la par de la aceleración de la producción. Las empresas pretenden despegar una cosa de la otra. A la vez, el titular del gremio de los obreros petroleros, Guillermo Pereyra, enfoca hacia situación la responsabilidad por las muertes.
En la discusión las empresas se aferran a la defensa de su renta. Esto es, tratan de evitar cualquier respuesta que impacte en los costos operativos de la producción. Mientras, Pereyra exigió como primera medida la ampliación de las dotaciones de personal en los pozos.
En la reunión del lunes no se llegó a ningún acuerdo. Sólo se pactó una nueva reunión para el jueves, esta vez de carácter técnico.
En los pozos
El gremio presiona por dos cuestiones: el diagrama de trabajo y la permanencia de los trabajadores mientras duermen en los yacimientos.
El Sindicato Petrolero informó que sacó a todos los trabajadores que dormían en los yacimientos
El convenio de los petroleros estipula dos días de trabajo por uno de franco. Esa relación se respeta en los diagramas. Impera el que contempla 14 días en el campo por siete de franco.
El sindicato de Pereyra junto con el gobierno de Gutiérrez propiciaron un cambio a un esquema de seis por tres. Las empresas lo rechazaron por el impacto en sus costos, entre otras cosas. Al final, podrían consensuar un diagrama de 10 por cinco.
El proyecto de Pereyra y Gutiérrez no sólo apunta a la seguridad. Mientras menos días continuados de franco ofrece el diagrama, menos atractivo es el trabajo para los operarios que llegan desde otras provincias. Actualmente, son muchos los que pasan siete días en sus lugares de origen y viajan a Neuquén para cumplir los 14 de trabajo.
