Otros dos testigos del undécimo juicio de lesa humanidad de Mendoza -el cuarto que se realiza en San Rafael- señalaron al cura Franco Reverberi Boschi, refugiado en Parma Italia, con pedido de extradición en marcha, como partícipe en las sesiones de torturas a presos políticos en esa ciudad sureña.
Sergio Chaki y Mario Bracamonte declararon este miércoles ante el tribunal que juzga a varios exmilitares y expolicías por su responsabilidad en crímenes de lesa humanidad. Como ha ocurrido en anteriores audiencias, ambos señalaron al excapellán del Ejército como uno de los participantes activos en vejámenes contra los detenidos políticos.
Chaki refirió que estuvo detenido en calabozos de Tribunales de San Rafael -centro clandestino de detención conocido como "la Departamental"- y allí, dijo, "el cura Reverberi que está en Italia estuvo en mi interrogatorio, armado".
Luego brindó su testimonio Mario Bracamonte, quien era empleado de la Municipalidad de San Rafael cuando fue detenido en el edificio comunal, golpeado allí, y trasladado a Infantería y a Tribunales.
"Una noche me sacan a bomberos, me torturan, me golpean, me vuelven otra vez a los calabozos. Un día como a las 2 de la tarde cayó el mayor (Luis Faustino) Suarez y venía el capellán, Franco Reverberi, vestido de militar con el arma en la cintura. Nos tuvieron hasta las 6 dándonos golpes, nos tiraban un balde de agua y nos teníamos que secar con el cuerpo. Ahí conocí la picana".
Siguió Bracamonte: "Los parientes se enteraron, acudieron al obispado, pero el obispo les dijo que no podían hacer nada".
Reverberi Boschi fue reconocido por varios sobrevivientes y declarantes en juicios por delitos de lesa humanidad como un habitué de las salas de tortura en San Rafael. En la actualidad el cura se refugia en Parma, donde da misa por streaming.
Renovado pedido de captura
En abril pasado, el juez federal de San Rafael, Eduardo Puigdéngolas, hizo lugar sendas presentaciones de la APDH San Rafael y de los fiscales Dante Vega y Pablo Garciarena, en representación del Ministerio Público Fiscal, y solicitó a la Cancillería que se formalice “el pedido de captura internacional y la consecuente solicitud de extradición” del cura Franco Reverberi Boschi.
El juez dejó constancia de la ampliación de imputación formulada tanto por Ricardo Ermili, de la APDH San Rafael y querellante, como por los fiscales Vega y Garciarena, en representación del Ministerio Público Fiscal.
Al sacerdote se lo acusa de 10 hechos en perjuicio de Roberto Rolando Flores, Sergio Segundo Chaki, Hugo Adelmo Riera, Mario Héctor Bracamonte, Luis Barahona, Alfredo Rafael Porras, Marcos Antonio Valdez, Roberto Rosales, Isidro Calívar y José Guillermo Berón.
