El Grupo Editorial SM anunció el cierre de su filial en Argentina, con lo cual dejará en la calle a 200 trabajadores. La empresa huyó del país por los efectos de la crisis económica sobre su rentabilidad.
Sólo cinco empleados quedarán en funciones. Los designaron para llevar adelante la representación comercial del cierre.
Los primeros telegramas de despido les llegaron a los promotores de la empresa en el interior del país. Este miércoles, les llegó la comunicación menos pensada a los empleados del área comercial.
Los trabajadores sospechaban de un recorte en la compañía, pero jamás se imaginaron el cierre. Las sospechas comenzaron con la caída de la renta desde que la crisis de la deuda le estalló al gobierno de Mauricio Macri.
Detrás del grupo editorial está la Fundación SM de origen español. Con su impronta marianista (de la Sociedad de María, congregación religiosa de la Iglesia católica) y valores evangélicos, la fundación se creó en 1977 con el objetivo de "dedicar los beneficios de la empresa SM a mejorar la calidad de la educación".
"Somos un proyecto cultural y educativo con un modelo empresarial propio y diferencial", reza la presentación de la filial argentina en su web. El grupo "integra en una única realidad el trabajo de la Fundación SM y el de las empresas que forman el grupo SM", agrega.
"La labor empresarial se centra en la elaboración de soluciones integrales para la educación y propuestas culturales en los ámbitos de la literatura infantil y juvenil y la religión católica", afirma la empresa que está a punto de hacer las valijas para dejar el país.