Un grupo de senadores estadounidenses, entre los que se cuentan algunos pre candidatos a presidente de ese país, advirtieron sobre el impacto ambiental de Vaca Muerta. Lo hicieron en una carta dirigida a varios fondos de inversión del gigante de la economía mundial.
La misiva se dirigió también a la Overseas Private Investment Corporation (Corporación para Inversiones Privadas en el Extranjero), una institución financiera de EE.UU. que apoya proyectos en el exterior.
Kamala Harris, Bernie Sanders y Cory Booker están entre los firmantes de la advertencia. También Jeffrey Merkley, Edward Markey y Chris Van Hollen, tres de los senadores más poderosos de Estados Unidos.
La noticia sobre la carta firmada por los senadores fue dada en un panorama empresarial del diario Clarín. Ocupó las líneas iniciales del informe que firmó Silvia Naishtat, quien planteó que la carta medió miedo en la industria local. Dice que el temor se funda en la posibilidad de que se frenen inversiones en la formación argentina.
La referencia a la misiva de los senadores estadounidenses finaliza con una especulación. "Están quienes sospechan de los propios petroleros de EE.UU. que “observan en Vaca Muerta una fuerte competencia”, deslizó un CEO escudado en el off the record", citó Naishtat.
La licencia ambiental
La consultora Verisk Maplecroft, una compañía hermana de Wood Mackenzie, que abrió una oficina en el país a comienzos de este año, emitió un informe que siembra dudas sobre el avance de la extracción de crudo y gas y Vaca Muerta. Wood Mackenzie es una consultora escuchada por los capitanes de los negocios petroleros del mundo. El trabajo fue revelado por el diario La Nación.
"Existe una gran preocupación sobre si la industria puede mantener su licencia social para operar, en medio de la rápida y algo descontrolada expansión de las obras de infraestructura hasta la fecha. Cuestiones que incluyen un fuerte aumento en el número de accidentes fatales en el lugar de trabajo, el desarrollo muy lento de servicios y la judicialización de las quejas de la comunidad amenazan a los operadores. Si la actividad del sector no logra ofrecer el desarrollo local prometido por las autoridades, existe un riesgo latente de oposición social en Neuquén, y las comunidades en Mendoza, Río Negro y La Pampa podrían movilizarse para restringir la actividad", consideró Verisk Maplecroft.
"Solo el 4% de Vaca Muerta está desarrollada. Se habla de que podría llegar a entre 10% y 15% en el corto plazo, pero con la infraestructura actual, el consenso es que colapsaría, porque hoy en día hay fuertes tensiones en lo que hace al costo y la calidad de las viviendas en toda la provincia de Neuquén", dice Jimena Blanco, de la consultora que avala el informe.