La venta de alimentos y bebidas cayó 28,7% desde que Javier Milei es presidente, según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Pese a que se trata de un rubro ineludible para la vida, los argentinos recortaron también en comida, en el marco de una caída general de ventas minoristas de 12,6% interanual y 22,1% acumulada desde enero.
Las ventas en alimentos y bebidas bajaron 15,5% anual en marzo, a precios constantes y acumulan una caída de 28,7% en los primeros tres meses del año frente al mismo periodo de 2023.
En la comparación intermensual, bajaron 2,7%. "Si bien los comercios señalan que se vendió poco y mal, su principal preocupación fue por el incremento en los costos fijos, especialmente en las boletas de luz, gas y también en los alquileres", señaló CAME.
"Muchos comercios recompusieron precios que venían atrasados y en los segmentos medios, eso desplazó ventas hacia los hipermercados con mejores promociones. Empresarios consultados marcaron faltantes de lácteos, yerbas y azúcar", agregó el reporte.
Mendoza está incluída en el relevamiento a través de las entidades agrupadas a la CAME como la FEM. “Marzo debería haber sido mejor que febrero y fue peor, mucho peor, es el indicador que ilustra al detalle lo mal que nos fue", señaló un comerciante de Godoy Cruz, citado por el informe.
Las cámaras piden auxilio, pero bancan a Milei
Días atrás la FEM y otras entidades que han dado su respaldo explícito al plan de ajuste y desguace de Milei le pidieron auxilio al intendente Ulpiano Suarez por la asfixia que el plan del libertario implica para sus bolsillos por la lógica caída del consumo.
Suarez les prometió un plan que incluye, entre otros puntos, cortar el tránsito de manera intermitente para fomentar el consumo en el centro. "Peatonalizaciones intermitentes", le llamó.
Los comerciantes, empresarios e industriales referenciados en la FEM, la UCIM, el CEM, entre otros, tienen el agua al cuello por la recesión y reconocen que en las pymes de Mendoza habrá despidos por el panorama de desguace, ajuste y licuación que supone el plan del presidente.
No obstante -como no desconocen que está en juego la reestructuración del poder a largo plazo -y la licuación del Estado como controlador de los privados-, siguen en su postura de apoyar al Gobierno nacional, como lo hicieron desde la primera hora.