La empresa Unisol, representante de Puma en la Argentina, cerró definitivamente la planta de producción que tenía en la localidad riojana de Chilecito y despidió a los 40 trabajadores que quedaban en relación de dependencia.
La fábrica de accesorios, ropa y calzado deportivo con sede central en la ciudad alemana de Herzogenaurach decidió sustituir la producción local por productos importados. El apoderado de Herzo, Marcelo Iglesias, dijo a BAE sobre el cierre: "la situación del mercado argentino nos llevó a discontinuar la actividad. No podemos competir con los productos importados que comenzaron a entrar al país desde fin de 2015".
En el mismo sentido, el secretario general del sindicato del calzado riojano, Javier Oñate, explicó: "la entrada de producto importado mató a la industria nacional. Antes el 80% de lo que vendía Puma se producía en el país, ahora apenas llega al 10. Tomaron la decisión de cerrar la planta porque ahora importarán lo que se realizaba en el país".
Directivos de la compañía alcanzaron un acuerdo con la Secretaría de Trabajo y el gremio, por lo que los trabajadores cobrarán en los próximos días el 100% de las indemnizaciones, y posteriormente un 20% extra en concepto de gratificación.
La secretaria de Trabajo de La Rioja, Miriam Espinoza, afirmó que tras alcanzar el acuerdo la compañía dijo que no existe peligro de cierre para las plantas establecidas en la capital de La Rioja y en Chamical.
Unisol había confirmado un plan de reestructuración en junio de 2017 cuando despidió a 180 empleados de sus plantas del interior riojano en las ciudades de Chamical y Chilecito.
Anteriormente la empresa de calzado ya había despedido 100 operarios en su planta de la localidad de Sanagasta en el mes de marzo, y suspendido otros en Chilecito y Chamical.