Alfredo Cornejo se juega el futuro inmediato a la suerte de su delfín Rodolfo Suárez en las elecciones, de antemano, con todas las de ganar, por su sucesión en la Gobernación de Mendoza. Lo contrario constituiría una hazaña de la camporista Anabel Fernández Sagasti, a la cabeza del Frente Elegí.
En las PASO, Cambia Mendoza sacó 43 por ciento contra 36 del Frente de Todos. Con un agravante para el devenir opositor: el caudal total se dividió en partes iguales entre los sectores de Fernández Sagasti y Alejandro Bermejo, el otro precandidato del frente liderado por el peronismo.
Una lectura de la composición del voto ajeno a las dos fuerzas más caudalosas ayuda a comprender la complejidad de la situación de la referente del kirchnerismo en Mendoza. Protectora sacó siete puntos, mientras el FIT no llegó a cuatro.
Desde el 9 de junio, cuando se abrieron las escuelas para la votación en las primarias, el tablero fue movido un par de veces. Las elecciones primarias presidenciales entonaron al frente peronista con una victoria de Alberto Fernández sobre Mauricio Macri en Mendoza. Y el triunfo del radical Raúl Rufeil sobre el intendente Jorge Giménez en las municipales de San Martín fue un trampolín para las expectativas de Cornejo.
La diferencia marcada por el frente de los radicales el 9 de junio es importante. No tanto como la que reflejaron los medios en el cierre de sus ediciones del domingo, con los datos de una porción del escrutinio manipulados a favor del candidato oficialista.
Están llamados a las urnas más de un millón cuatrocientos mil mendocinos. Los resultados del escrutinio provisorio se conocerán desde las 21.
Hay cuatro listas en competencia. Suárez va con el intendente de Junín, Mario Abed, como candidato a vice. Fernández Sagasti lleva de compañero a Jorge Tanús. Protectora postula a José Luis Ramón con Mario Vadillo. Y el Frente de Izquierda y los Trabajadores postula a Noelia Barbeito con Soledad Sosa.