Ocho de cada 100 habitantes del Gran Mendoza son indigentes. Es un dato revelador del desastroso resultado de la política macrista implementada por el radical Alfredo Cornejo con fuerte apoyo del establishment provincial entre diciembre de 2015 y el mismo mes del año pasado. En el segundo semestre de 2019, la pobreza alcanzó al 38,6 por ciento de los pobladores del Gran Mendoza.
Los números de pobreza e indigencia para la segunda mitad del año pasado producidos por el INDEC fueron difundidos este miércoles.
Sólo en el Gran Mendoza, sector territorial abarcado por la medición oficial nacional, se contaban 382.293 pobres. Mientras que 80.272 personas vivían en condiciones de indigencia en la misma porción geográfica de la provincia.
En los últimos dos años del gobierno de Cornejo, el índice de pobreza trepó del 26,4 por ciento al 38,6 por ciento. La indigencia por muy poco no se duplicó en ese lapso, pasando de 4,2 a 7,9 por ciento.
En hogares, la indigencia trepó hasta el 5,6 por ciento en la segunda mitad del año pasado. Mientras que la pobreza lo hizo hasta el 28,9 por ciento.
Son indigentes quienes no obtienen ingresos suficientes para pagar la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que contempla sólo los alimentos básicos. Y son pobres aquellos que no consiguen ingresos para hacer frente a la Canasta Básica Total (CBT), que además de los alimentos involucra la vestimenta, transporte y salud, entre otros rubros.
Una de las causas de los desastrosos resultados de la medición de pobreza es la fuerte destrucción del empleo que cobijó la política de Cornejo.
Mendoza perdió 3400 puestos de trabajo registrado del sector privado en un mes
La política que propició la destrucción de puestos de trabajo y el aumento a niveles vergonzosos de la pobreza y la indigencia contó con un respaldo total del establishment provincial, que puso sus medios de comunicación para validar las acciones que resultaron en el desastre social que revelan los datos difundidos por el INDEC respecto a la cantidad de mendocinos que no tienen ingresos suficientes ni para comer.
