La investigación se hace en dos universidades argentinas y apunta a aprovechar los hidratos de carbono en descomposición que se convierten en alcohol.
Las zanahorias pueden ser materia prima para la elaboración de bioetanol, también denominado “combustible verde”, a partir de un desarrollo conjunto de dos universidades santafesinas.
La investigación apunta a aprovechar los hidratos de carbono, que en forma de azúcares, son parte de la composición de la zanahoria, y que puede ser fermentables, es decir ser convertido en alcohol.
La iniciativa surgió con la necesidad de encontrarle un uso útil al 30% de la producción de esta hortaliza, que era descartada por no cumplir las condiciones necesarias para salir al mercado. Esta situación generaba además un importante foco de contaminación del suelo.
El producto representa la elaboración de bioetanol en una forma innovadora, no conocida hasta ahora, ya que es desarrollado a base de caña de azúcar, remolacha azucarera, maíz, entre otros cultivos.
El trabajo surgió como parte de la tesis de doctorado de la licenciada en biotecnología y doctora en ciencias químicas Nora Aimaretti, docente además de las Universidades del Centro Educativo Latinoamericano, con sede en Rosario y de la Universidad Nacional del Litoral, con sede en Santa Fe. La investigación contó con la dirección de Juan Carlos Yori, también especialista del área y docente de la UNL. Ambos coordinan el equipo de profesionales que llevó adelante el logro.
“Lo que hicimos nosotros, fue ver la viabilidad de obtener esos azúcares, de los cuales sabíamos su existencia y que eran factibles de extraer, mejorar la metodología para hacerlo, porque en la medida que pueda extraer más azúcares, podré obtener más alcohol. Posteriormente se probaron distintas levaduras como catalizadores de reacción de la fermentación”, comenta Yori en diálogo con EL OTRO MATE.
Los resultados alcanzados pueden representar una alternativa a problemas existes con la producción de bioetanol, teniendo en cuenta que este año La Organización de Naciones Unidas pidió al gobierno de Estados Unidos que suspenda la producción de etanol como biocombustible, país que es el mayor productor del material en base de maíz, dada la situación de crisis alimentaria global.
En relación a la implementación y puesta en marcha de la faz práctica, Yori detalló que “estamos acordando los puntos del convenio que se va a firmar con los productores, ellos están interesados en construir una planta, en principio sería una planta piloto. Por otro lado, a través de la universidad, estamos llevando adelante los estudios de mercado y posteriormente la tecnología de proceso.”
Las perspectivas son esperanzadoras ya que el bioetanol puede ser utilizado también en otras industrias como perfumería, cosmética, farmacopea. Por otro lado, representa una solución concreta para un problema tanto económico como medioambiental.
Pensando en el futuro, Yori destacó que “la provincia (Santa Fe) ha manifestado su interés en el desarrollo que podría generar un proceso de industrialización a partir de la creación de estas plantas, que además de crear fuentes de trabajo avanza hacia un producto de valor agregado”.
Fuente: El Otro Mate
