Un joven blanco fuertemente armado mató a tiros a 10 personas en una tienda de Búfalo (Nueva York) el sábado. Según las autoridades, al parecer, se trató de un crimen con “motivación racial” y, por el momento, lo catalogan como el tiroteo más sangriento en lo que va del año en curso.
“Lo que preocupa ahora mismo es que los atacantes, en este caso los victimarios, son de menor edad, ya no estamos hablando de algún exsoldado que vino de la guerra y tiene alguna afectación psicológica, por lo tanto, comete estos tipos de acciones”, ha puntualizado el analista Luis Javier Ruiz. En una entrevista concedida este domingo a HispanTV, el experto ha atribuido las elevadas cifras de la violencia armada en Estados Unidos a las fallidas políticas de control de armas en este país.
Además, tal como ha explicado, las extremas condiciones económicas en EE.UU., como la inflación, el incremento del precio de la gasolina y de los alimentos, también provocan a las personas con un estado emocional altamente vulnerable a cometer actos violentos. Esto, mientras que la violencia armada en Estados Unidos ha sido un problema social crónico que parece no tener solución.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) estimó que se vendieron un número récord de 17 millones de armas desde enero de 2021 hasta noviembre de 2021.
