Un niño palestino de cuatro años murió este lunes por el disparo de un tanque israelí en el norte de Gaza, según el portavoz de los servicios de emergencias Ashraf al-Qudra. Fue después de que un misil impactara contra su casa al este de Jabaliya, donde recrudecieron los combates entre Hamás e Israel.
El niño, Samih Ijneid, fue la primera víctima en Gaza este lunes, aunque otros tres palestinos han sucumbido ante la gravedad de sus heridas durante la noche.
El conflicto había amainado la pasada noche, en la que Hamás lanzó un sólo proyectil contra Israel y el Ejército israelí, ninguno, coincidiendo con la fiesta musulmana de Eid al-Fitr.
Este hecho sucede después de que la ONU y EEUU pidieran el cese de las hostilidades. John Kerry, secretario de Estado estadounidense, ha estado tratando de llegar a una tregua desde hace una semana junto a Egipto. El presidente Barack Obama ha pedido un alto el fuego "inmediato, incondicional y humanitario".
Tras 21 días de intensos bombardeos israelíes por tierra, mar y aire, han muerto unas 1.100 personas, en su gran mayoría civiles palestinos. De ellos, más de 800 sólo en los diez días que dura la incursión terrestre israelí, que ha desatado combates cuerpo a cuerpo en los que ya han perecido 43 soldados de Israel y un número desconocido de milicianos.
Según cifras de la agencia de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), cerca de una cuarta parte de las víctimas totales son niños y más de dos centenares mujeres y ancianos.
