A un año del envío de la ley del cianuro, y la consecuente pueblada del agua, la Asamblea por el Agua y organizaciones barriales, políticas y ong ambientalistas volvieron a las calles en defensa de la Ley 7722, contra el fracking y en solidaridad con el pueblo de Chubut, que resiste a la zonificación minera planeada por el gobernador Mariano Arcioni.
Desde las 18 se reunieron en la Peatonal de la capital mendocina para recordarle al gobierno de Rodolfo Suarez que no hay licencia social para avanzar en Mendoza con la megaminería, como aseguró el mandatario en diversas entrevistas al cumplirse un año de su gobierno.
El primer año de Suarez termina como empezó: con permanente arenga prominera y de ajuste
Entre los reclamos específicos, los asambleístas lasherinos cuestionaron el plan de ordenamiento territorial impulsado por el intendente de Las Heras, Daniel Orozco, que no incluyó la declaración de área protegida Uspallata-Polvaredas y en cambio introduce como "deseable" la megaminería metalífera, el fracking y los emprendimientos inmobiliarios a gran escala. "La ruta sanmartiniana jamás será la de la megaminería y el fracking".
En la marcha se repudió además la avanzada del intendente de Malargüe para zonificar ese departamento, exceptuándolo de la aplicación de la Ley 7722, que prohíbe el cianuro y otros tóxicos en la minería.
La columna avanzó por la Peatonal y luego por San Martín hacia el norte detrás de la bandera "Mendoza libre de fracking" y al grito "¡El aguade Mendoza no se negocia!", que guió la pueblada del agua de diciembre. Este año se sumaron pabellones en solidaridad con el pueblo de Chubut.
