La titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, aseguró que el organismo no pedirá un ajuste adicional a la Argentina para renegociar los US$ 44.000 millones que adeuda el país, y trazó la línea que llevará adelante la misión técnica del organismo que arribó a Buenos Aires para dialogar con el Gobierno, empresarios y sindicalistas.
Georgieva aseguró que la misión buscará “ayudar a la Argentina a definir unos objetivos de crecimiento a mediano plazo” y que el FMI busca ser parte de una “solución duradera a lo que ha sido durante tanto tiempo ciclos de auge y caída” en el país.
Además, le deseó al pueblo argentino “todo lo mejor en este momento tan difícil” debido a que el país “ha sido golpeado dos veces, una por las dificultades económicas, el aumento de la pobreza, la inflación y las medidas que se han tomado para estabilizar la economía. Y la segunda vez por la pandemia que golpea a todos”.
Con Guzmán y Pesce
El martes por la tarde, en la sede del Palacio de Hacienda, el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, mantuvieron una "excelente reunión" con la delegación del Fondo Monetario Internacional (FMI) que visita el país, aseguraron fuente oficiales a Télam.
Este fue el primer encuentro programado para la delegación del organismo multilateral que permanecerá en el país hasta el viernes inclusive.
Guzmán, Pesce y el representante argentino ante el FMI, Sergio Chodos, recibieron a la directora adjunta del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Julie Kozack, y Luis Cubeddu, jefe de la Misión para Argentina.
Esta fue la primera reunión que mantuvieron los funcionarios con los integrantes de la misión técnica del FMI en el marco de las conversaciones iniciadas para acordar un nuevo programa de financiamiento para la deuda de US$ 44.000 millones que la Argentina tiene con el organismo.
“Viajamos a Argentina para escuchar a las autoridades, para escuchar al pueblo argentino. Hemos tenido muy claro en esta crisis que es importante brindar apoyo a las empresas y, lo que es más importante, a los trabajadores. Así que no venimos con la idea de ‘bueno, veamos cómo podemos ajustar aún más el gasto en estos tiempos’", dijo Georgieva en un reportaje concedido a CNN en Español.
La directora se refirió al trabajo que llevará adelante la misión encabezada por la directora adjunta del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Julie Kozack; y el jefe del caso argentino, Luis Cubeddu; quienes se reunieron con el representante permanente del Fondo en Argentina, Trevor Alleyne.
Esta misión también tiene en agenda una reunión con el titular del Banco Central, Miguel Pesce, tras las medidas económicas y cambiarias anunciadas en las últimas semanas para recomponer el nivel de las reservas.
Reunión con la CGT
Asimismo, se reunirá el jueves con representantes de la Confederación General del Trabajo (CGT), cuyo secretario general adjunto, Andrés Rodríguez, confirmó el encuentro.
Rodríguez dijo que el sector sindical le pedirá a FMI que el acuerdo con el Gobierno argentino "sea buscando un equilibrio, sin un ajuste despiadado".
Kozack, Bubeddu y Alleyne también tienen en agenda el jueves un encuentro con la cúpula de la Unión Industrial Argentina (UIA).
El lunes, el Gobierno mantuvo un encuentro con entidades empresarias, sindicales y organizaciones sociales en las que el ministro Guzmán los convocó a involucrarse en las negociaciones para alcanzar un nuevo programa de financiamiento con el organismo multilateral.
Macroeconomía y estabilidad
Con el FMI "lo que buscamos es un programa que ayude a Argentina. Este es un proceso que importa a la sociedad en su conjunto porque hace a la cuestión macroeconómica, la estabilidad y la generación de empleo", dijo Guzmán durante la reunión celebrada en Casa de Gobierno.
"Queremos involucrarlos a todos ustedes para trabajar de forma articulada en este proceso como también lo hicimos durante la reestructuración de la deuda con acreedores privados y agradecemos el apoyo que valió para Argentina", sostuvo el ministro.
Guzmán insistió en que esta negociación "es una tarea colectiva” y que “una de las cosas que más nos ayudó en ese proceso tan complejo de reestructurar la deuda (con los acreedores privados locales y del extranjero) fue que hubo legitimidad. Ante el mundo se vio eso".