Pese a la cláusula que los obliga a no protestar ni hacer huelgas, ATE aceptó la última oferta de Alfredo Cornejo en las paritarias. Votó poco más de la mitad de los estatales habilitados para hacerlo (55%), y de estos un grupo votó por la aceptación de subir los bonos en negro y otro por el aumento de 11% con revisión en junio.
Cornejo aprieta a los gremios con una cláusula que les prohíbe protestar y hacer huelgas
El gremio comunicó la aceptación en la Subsecretaría de Trabajo. "Se impuso la aceptación de la primera propuesta en los regímenes 05 y 15, mientras se optó por la segunda en los regímenes 13, 35 y Guardaparques", indicó Roberto Macho, referente de ATE.
“Después de tres paritarias que tuvimos, la propuesta fue aceptada, a través de un plebiscito que llevamos adelante, para los trabajadores de Salud, Administración Central, de los entes autárquicos y descentralizados. Queremos destacar que votó más del 55% de los trabajadores. La propuesta estaba a disposición desde el día sábado, así que tuvieron tiempo para analizarla y votarla”, apuntó Macho.
Detalló que “el 67% de los trabajadores del Régimen 15 votó por la primera opción, que contempla un aumento salarial del 10% para abril, 10% en mayo y 10% en junio, más una cláusula de garantía con montos de $150.000 dividida en esos meses, con un cambio de la base de cálculo para enero de este año y otra para el mes de julio, cuando volvamos a discutir las condiciones salariales”.
El apriete de Cornejo
Cornejo incluyó en esta ronda de paritarias una "cláusula compromiso" para obligar a los gremios por escrito a no hacer protestas o huelgas. El acta paritaria que impulsa el gobernador dejaría así por sentado un pacto que viola el derecho a hacer huelga, tutelado por la Constitución y protegido además por pactos internacionales de jerarquía constitucional.
De esta manera, el Ejecutivo pretende pulverizar protestas o paros en el sector estatal, ya sea de maestros, médicos o el resto de los trabajadores.
En las paritarias el Gobierno viene ofreciéndoles a los sindicatos aumentos referenciados a los salarios de diciembre de 2023, cuando aún no se contabilizaba el brusco salto inflacionario cuando Javier Milei llegó al poder, y que en Mendoza superó el 25%.
Ahora el Gobierno les ofreció a ATE, AMPROS y el SUTE aumentos que tomen como referencia los salarios de enero y julio de 2024, volviéndose a reunir para una nueva discusión en junio. Pero a cambio pide que los sindicatos se abstengan "de adoptar cualquier medida de acción directa durante el período de cumplimiento de lo aquí convenido".
