Gimenez vivía desde hace varios años en España, y estaba afincado en Sitges, un bello pueblo catalán con playas a orillas del Mediterráneo a unos 40 minutos de Barcelona, y había viajado a Mendoza a mediados del mes de marzo.
El historietista arribó a Mendoza a mediados de marzo con la intención de presentar una muestra y visitar a familiares y amigo, pero llegó con la infección a cuestas y recién iniciada la cuarentena, el 22 de marzo tuvo que ser internado en terapia intensiva en el Hospital Central, donde no pudo salir de su cuadro y finalmente falleció.
Hijo de un trabajador de la industria del petróleo, Giménez empezó a dedicarse a la historieta a los 16 años, fue integrante del equipo de la revista "Fierro",
Estaba radicado en España desde la década del 70: "Llegué a Europa por el interés personal de conocer otros países, pero además fui atraído por la intriga de probar suerte con mi profesión de dibujante", contó alguna vez.
Fue autor de algunas de las obras más reconocidas del cómic argentino, como "As de Pike", "Estrella Negra" (con Ricardo Barreiro como guionista) y los nueve tomos de "La casta de los Metabarones" junto con el chileno Alejandro Jodorowsky. También de "Cuestión de tiempo", "Basura", "El cuarto poder" y "Ciudad" .
A lo largo de su trayectoria, el dibujante había colaborado en algunas entregas de la francesa Métal Hurlant y legó a exponer en 1997 en el Centre Pompidou, de París. Recibió diversos premios, entre ellos fue distinguido como "el mejor dibujante del mundo" en el Salón del Cómic y la Ilustración de Barcelona en 1984, y con el prestigioso Bulle d'Or, en 1994. Cuatro años antes, en 1990, había recibido el Yellow Kid norteamericano a Mejor Dibujante Extranjero, uno de los más prestigiosos del cómic.
Para dar por tierra el dicho que "nadie es profeta en su tierra", en Mendoza le reconocieron su labor en 2014 cuando lo declararon Ciudadano Ilustre, y cuatro años antes, en el Espacio Cultural de Arte le dedicaron su muestra homenaje.
El ex secretario de Cultura de Mendoza, Diego Gareca, posteó en Twitter: "Con mucho dolor despedimos al maestro universal Juan Giménez, una gran pérdida para la Cultura de Mendoza. Acompañamos a familiares y amigos en este difícil momento".
El ex titular de la cartera cultural le dijo a Télam: "Yo lo conocí y me resultó una tristeza muy grande su fallecimiento".
La muerte de Giménez causó tristeza y muchos reflejaron su pesar en las redes sociales, como el historietista Ricardo Siri, conocido como Liniers, que posteó "esta enfermedad de mierda se llevó al maestro Juan Giménez" y definió a la jornada de su deceso como "mal día para el cómic" a raíz de esta noticia.
"Falleció el reconocido dibujante e historietista mendocino Juan Giménez", escribió por su parte Miguel Rep, mientras que el periodista y productor cinematográfico, Aхel Kυѕcнevaтzĸy escribió en su cuenta de Twitter: "Juan Giménez fue una persona adorable y un dibujante y narrador alucinante. Los muertos por el Coranavirus no son cifras abstractas. La pandemia se está llevando personas y universos creativos enteros. Es muy triste todo esto".
Horacio Altuna, otro historietista argentino residente en España, lo despidió entonces también en esa red social: "Se nos fue Juan Giménez. Fue colega, maestro y amigo. Era único, inolvidable. Hasta siempre, Juan".
La partida de Giménez causó conmoción en el ambiente artístico local, a quién grandes referentes lo ponen a la altura de Joaquín Lavado, más conocido como "Quino", y en ese sentido, el dibujante e ilustrador mendocino Pablo Pavezka, dijo: "Juan Giménez era otro Quino, y no exagero. Aunque Giménez era dibujante de historietas y lógicamente trabajaba con guiones de otros, era un maestro internacional", y explicó que "es como si en cine dijeras Kubrick o Spielberg. De hecho, hay cosas de cine que se basaron en él. En Europa es muy conocido, era un groso de verdad".